Al referirnos al tema ambiental, necesariamente tenemos que referirnos a una variedad de temas pendientes de solución; expresado de otra manera, asumimos este tema, como si nos avocásemos a un problema de carácter sinonímico. Y ello porque sencillamente no podemos hablar del medio ambiente en el Perú, sin tener la exigencia moral, social y legal de hablar de los problemas que afronta el medio ambiente en el Perú.
Al igual que en la mayoría de países en el mundo, los problemas ambientales se encuentran relacionados con aspectos de orden físico y social, fundamentalmente. Por lo que la coexistencia entre naturaleza y hombre se torna complicado de estudiar y analizar con la finalidad de procurar brindar mecanismos idóneos para la vida del hombre en consonancia con la naturaleza o lo que es lo mismo decir, en consonancia con el medio ambiente del que el hombre es parte.
En cuanto a los aspectos de orden físico, nos toca evaluar el mal manejo que el hombre hace de la naturaleza y de los recursos que en ella se encuentran.
En cuanto a los aspectos de orden social, evaluamos los problemas que el propio hombre crea emprendiendo una embestida contra sus propias condiciones de vida.
Así, si por sólo citar un ejemplo, una familia del Valle del Mantaro (Junín) decide asentarse cerca a las riberas de un río, veremos que es en el río donde empieza a lavar su ropa, crea silos o baños higiénicos cercanos al mismo, donde los desperdicios van a dar al mismo río. Y si además de ello, el río antes de su asentamiento evidenciaba presencia de algunas plantas o especies animales, con el paso del tiempo, todo se irá extinguiendo por el propio accionar de la familia que decidió asentarse cerca al río en cuestión.
Lo que expreso no busca de modo alguno, desprestigiar o desvalorizar a las familias del Valle del Mantaro, ya que así, como se pudo tratar de una familia de la Región Junín, pudimos referirnos a una familia de la Región Lima, Piura, La Libertad o Loreto, debido a que independientemente de nuestra localización geográfica, nuestros hábitos y costumbres son similares.
Otro tema pendiente de solución y que empieza a causar alarma en los círculos científicos y académicos, es el de la tala indiscriminada de los árboles, los mismos que requieren muchos años para tener el tamaño y majestuosidad que apreciamos en algunos lugares de nuestro país.
Es un tema que no se resuelve promoviendo la siembra improvisada y publicitada por algunos organismos e instituciones, sino que requiere de un estricto control e implementación de una explotación racional y responsable por quienes se dedican a esta actividad.
Y es que lamentablemente la existencia humana se encuentra disociada con la existencia de la naturaleza, por lo mismo que los primeros siempre han vivido a expensas de lo segundo creyendo que todo cuanto existe siempre hiba a ser duradero y eterno, sin caer en la cuenta, que la mayoría de recursos naturales no son renovables y que sólo tienen un periodo de existencia.
Ricardo Rivas Pizarro.
Consultor Ambiental.
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